Esta pequeña historia que vais a escuchar es algo mágico para mí, es la historia del gato Serafín. Si os digo la verdad, no recuerdo el momento exacto de mi infancia en el que mi madre me la contó por primera vez, pero os puedo asegurar que aquella primera vez no dista mucho de lo que en esta grabación vais a oír.
Esta entrada es un pequeño homenaje a mi madre. Mi madre a día de hoy es gerente de familia, reloj/despertador para cada miembro de la casa, cocinera, limpiadora, enfermera, lavandera, psicopedagoga, entrenadora, peluquera, oficial de seguridad, secretaria, psicóloga, cajero automático y cómo un GPS (porque os aseguro que cuando ella va .. ¡me lo encuentra todo!). Pero pese a ser una supermadre jamás consiguió su sueño: ser profesora. (Os contaría montones de cosas sobre ella, pero sólo con oír su voz entenderéis un trocito de mi vida, un trocito de su cuento)
¡Qué pedazo de homenaje le has hecho a tu madre!
ResponderEliminarLa mejor manera de amar la literatura es "mamarla" y parece que tú has tenido la suerte de hacerlo :)
Te la anoto.
Tu madre seguro que está muy orgullosa de tener una hija como tú Cris, una entrada preciosa!!!!!
ResponderEliminar¡Entrañable! ¡Qué gozoso homenaje a tu madre!
ResponderEliminarLa historia de Serafín es bonita, pero esa forma DE contarla de tu madre es conmovedora y le da un valor añadido. ¡Un Óscar para ella ya!